Ellas entre lino y vino

En el corazón de la Reserva de la Bioesfera de los Montes de Anaga se encuentra un barranco cargado de laurisilva, antes conocido como el “Río de Anaga”. Todavía, si prestamos una sensible atención, podemos escuchar su histórico caudal cabalgando por las tierras de su monte.

Quizás sus aguas no siguen corriendo como antes, pero sí que pervive una actividad esencial que se daba en este entorno tan paradigmático. Se trata del trabajo textil del lino, llevado a cabo durante años por las mujeres de Los Batanes y que da nombre a toda la zona -la Cueva del Lino-. 

Seremos capaces de conocerlo a través de los ejercicios de recuperación y preservación de su memoria histórica, en donde la asociación de vecinos de la zona cobra un papel trascendental, así como de la continuación moderna de estas técnicas tradicionales en nuevas mujeres rurales. Para ello podremos conocer a Marisol de Slow Loom (extra), una artesana que trabaja con telar tradicional de madera de lino, para fomentar su preservación y protegerlo del olvido.

Sin embargo, las maravillas del Batán no se quedan aquí. Su implicación rural pasa por muchos y diversos trabajos con la tierra, como son los viñedos y la producción del vino de la zona. Para ello, conoceremos la labor de Ana (si disponible), técnica en vitivinicultura y enología de la bodega de los 500 escalones, la mano que nos dará a conocer las maravillas de estas tierras empapadas de verde, de historia y de futuro.

SIN ELLAS, NO HAY LINO NI HISTORIA